Enclavado en el escarpado Bodmin Moor, en Cornualles, el Salón del Rey Arturo ha intrigado a historiadores y lugareños durante siglos.
El pecio permaneció cerca de 500 años hundido y para la operación se utilizó robótica submarina de última vanguardia
Ambos esqueletos de 4 mil 800 años de antigüedad desconcertaron a los arqueólogos al observar que la mujer miraba al pequeño al momento de su muerte