¡Regresa al teatro!

Ciudad de México

Este domingo Silvia Pinal cumplió su deseo de volver al teatro con la puesta en escena “Caperucita, ¡qué onda con tu abuelita!”, luego de que el pasado 11 de mayo cancelara su participación en la obra por un problema de presión.

Este domingo, el público la vio aparecer en el escenario en una silla decorada como un trono con el que recorrió el lugar mientras los y las bailarinas le daban la bienvenida cantando y bailando. Ella misma alzó los brazos, saludó al público, mandó besos y cantó en medio de un emocionante aplauso.

“Gracias a todos por estar conmigo aquí, hoy es un día especial para mi vida, soy una actriz y me siento tan feliz, es un placer saludar a mis amigos”. Laura Zapata compartió en su cuenta de Twitter un fragmento de ese número con la señora Silvia Pinal, y escribió “Aquí está la Gran Diva Silvia Pinal. Una reina”.

Pati Chapoy también utilizó su cuenta de Twitter para felicitarla en este estreno. “Mi cariño y admiración para mi querida Silvia Pinal en su estreno”.

DÍAS DE POLÉMICA

El miércoles 11 de mayo, alrededor de las diez de la noche, Silvia Pinal se retiró del teatro que lleva su nombre luego de presentar una baja en su presión arterial, por lo que no pudo estrenar dicha obra.

Las críticas hacia sus hijos (Sylvia Pasquel, Alejandra Guzmán y Luis Enrique Guzmán) no se hicieron esperar, por el hecho de “exponer” a su madre de esa forma en tan avanzada edad. Norma Lazareno fue quien sustituyó a Silvia.

En una entrevista con “De primera mano”, Sylvia Pasquel lamentó dichos comentarios. Comentó al respecto que ella no estaba de vacaciones cuando ocurrió lo de su madre, que ella ha estado grabando una serie y ni siquiera pudo pasar el diez de mayo con ella. También lloró señalando que su mamá se enfermó del estómago y eso generó que tuviera problemas de salud pero que le dolía mucho la crítica constante hacia ellos, sin importar el sentimiento de su madre.

“No hablan bien nunca de mi familia, nada les embona, nadie está aquí verdad, nadie viene a ver a mi mamá, quién le habla por teléfono, quién la viene a ver, quién la invita a salir, ninguno de los que están hablando mal de ella y de la decisión de que haga la obra de teatro. “Guárdenla” (dicen), pues ni que fuera un mueble, mi mamá tiene derecho a vivir y a estar feliz, no la voy a guardar en una cama, en un cuarto, a que se muera viendo sentada en un reposet la televisión, si mi mamá está para disfrutar de la vida”.

Agregó que hay cosas que su mamá ya no puede hacer por su edad, y que nadie está allí para apoyarla, en cambio la critican. Sin embargo, agregó que hay algo que aún hace brillar los ojos de su mamá: la ilusión de volver al teatro; este domingo lo hizo.