¡Rompe tabúes!

Ciudad de México

Hace 24 años, la reynosense Dinora Garza recibió todo el apoyo de sus padres para desafiar a la sociedad y dedicarse a jugar futbol.

En aquellos años, su familia tuvo que apoyarla en la compra de uniformes, tachones y con todo lo que costaba iniciar en la práctica de este deporte a nivel amateur.

Este año, Dinora pagó los boletos de avión de sus padres, para que la vieran jugar en el Estadio Olímpico Universitario, defendiendo la playera de Pumas.

"Yo inicié en los años en que era un tabú que una niña jugara al futbol en Reynosa, y por ser la única niña en un equipo de futbol de niños. Me lleve muchas faltas de respeto de los padres, que espero que ahorita se mueran de vergüenza por eso, porque es algo que no se puede hacer y menos con niñas", mencionó.

Finalmente, hoy la mediocampista de Pumas puede decir que ya vive del futbol, algo impensable en sus años como estudiante.

"El apoyo económico siempre estuvo de parte de mis padres, comprando los tachones, pagando los viajes, las espinilleras y, ahorita, estamos gozando de algo que sufrimos muchos años", recordó.

"Hubo quien no tuvo la fortuna de estar viviendo esto, que es el profesionalismo, tener una cancha de futbol, un uniforme, que te paguen, mucho o poco, pero que ya no salga de tu bolsillo".