Rápido y Curioso

Con fama efímera

Estaban diseñados para enamorar a varias generaciones, pero sus carreras quedaron en una bonita postal

  • Por: AGENCIAS
  • 09 OCTUBRE 2017 - .
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Su papel de psicópata encantador en el tenso ‘thriller’ ‘Calma total’ (Phillip Noyce, 1989) .

BILLY ZANE (1966, EU) 

Su papel de psicópata encantador en el tenso ‘thriller’ ‘Calma total’ (Phillip Noyce, 1989) y su parecido con Marlon Brando hicieron que Hollywood saludase a Zane como la nueva esperanza para un Hollywood que necesitaba un recambio original para todos los ídolos masculinos de los ochenta. Pero unas cuantas decisiones nefastas (‘thrillers’ eróticos menores como ‘Un hombre y dos mujeres’ o cine de acción de cartón piedra como ‘The Phantom’) hicieron que, cuando llegó 1998 e interpretó al malvado prometido de Kate Winslet en ‘Titanic’, ya nadie recordase que él estaba llamado a ser el nuevo Brando.

JAYNE MANSFIELD (1933-1967, EU) 

”Si Jayne Mansfield es un icono a día de hoy es, lamentablemente, por su violenta muerte en un accidente de coche y por toda la leyenda negra (una supuesta decapitación, una supuesta maldición de Anton LaVey) que la rodea. Pero esta rubia con la que 20th Century Fox intentó crear a su propia Marilyn Monroe nunca superó su condición de parodia de un mito y muy pocos años después de comenzar su carrera con éxitos como ‘Tú sabes lo que quiero’ (1956) ya estaba protagonizando desnudos en películas de serie B. Falleció en 1967, con solo 34 años.

DENISE RICHARDS (1971, EU) 

Una de las bombas sexuales más obvias de los noventa se presentó al mundo en ‘Las brigadas del espacio’ (1997) y amortizó en apenas una hora de divertidísima ‘Juegos salvajes’ (1998) su paso por el quirófano para dejarse la anatomía más perfecta de Hollywood. Su papel de chica Bond en ‘El mundo nunca es suficiente’ (1999) pareció que la catapultaría a la primera división de las bellezas de Hollywood. Pero ahí se quedó todo. Una serie de malas decisiones (empezando por casarse con Charlie Sheen) la relegó a parodias como ‘Scary Movie 3’ y a ser carne del ‘Mira quien baila’ estadounidense.

NATASHA HENSTRIDGE (1974, CANADÁ) 

‘Especie mortal’ (Roger Donaldson, 1995) fue una de esas disfrutables mezclas de terror, ciencia ficción y sexo: un alienígena dispuesto a cargarse la humanidad llega a la Tierra con el cuerpo de una supermodelo rusa. Estábamos llamados a ver aquella película, pero no a tomarnos en serio a nadie que apareciese en ella. Especialmente a su protagonista, que al protagonizar ‘Especie Mortal II’ (1998) y ‘Especie mortal III’ (2004) se encasilló en el papel y no se salvó ni mostrando su vis cómica en ‘Falsas apariencias’ (2000).

LINDA FIORENTINO (1958, EU)

La respuesta morena a Sharon Stone demostró en la inmensa ‘La última seducción’ (John Dahl, 1994) que lo tenía todo para igualar a la rubia y, si hacía falta, superarla como gran ‘femme fatale’ de finales de siglo. Pero la suerte no estuvo con ella (‘Jade’, su siguiente gran apuesta, fue uno de los mayores fracasos de crítica y público de 1995) y, al parecer, tampoco el buen humor: la leyenda dice que era una de las actrices más difíciles de Hollywood en un set y que eso acabó convirtiéndose en su finiquito.

CASPER VAN DIEN (1968, EU)

Rubio, musculoso, impecable, vacío. Todo esto fue perfecto para su papel de héroe en el clásico de culto ‘Las brigadas del espacio’ (1997), que se sustentaba sobre efectos especiales de insectos gigantes y dosis de ironía todavía más grandes. Pero el quarterback del instituto sin mácula ya no funcionaba en una década que había elevado a Leonardo DiCaprio y Jonnhy Depp como nuevos referentes masculinos de la pantalla. Su carrera continuó (y continúa) en televisión y cintas de acción pensadas para el videoclub.

WILLIAM BALDWIN (1963, EU)

Era el Baldwin guapo: ojos azules, mandíbula prominente y un cuerpo que Calvin Klein reclamó para usar en su publicidad. Hollywood tomó en cuenta todo esto y su apellido y estuvo dispuesto a darle mil oportunidades que empezaron con el éxito ‘Llamaradas’ (1991), pero ninguna de las posteriores le funcionó: ni ‘Sliver’ (1993) con Sharon Stone, ni ‘Caza legal’ (1995) ¡con Cindy Crawford!, ni ‘Virus’ (1998). Eso sí, la televisión, como siempre, apareció para salvarlo.

BRANDON ROUTH (1979, EU) 

Lo de este chico fue uno de los casos de mayor bombo publicitario y menos carrera de la historia de Hollywood. Cuando Brian Singer lo eligió para ser su Superman en 2006 el mundo parecía esperarlo con los brazos abiertos. Pero luego ocurrió lo peor que le puede ocurrir a una película así: que a los propios fans de la saga no les gustó. La película no fue nada parecido a un fracaso, pero él prefirió explotar su vis cómica en películas más pequeñas. Desde entonces ha vuelto a ser un héroe, pero en televisión con ‘Legends of tomorrow’ (2016). Respecto al traje de Superman, Henry Cavill se lo ha robado ya para siempre.

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