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Sigue el terror en el pueblo

El estruendo de las poderosas armas de fuego dejaron un herido que huía de los militares en el bulevar Hidalgo

  • Por: POR ANTONIO RAMÍREZ
  • 14 NOVIEMBRE 2015 - .
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La camioneta pick up que quedó embancada dentro del estacionamiento del motel Plaza presentaba numerosos impactos de bala.

A menos de 48 horas de haberse registrado una terrible tragedia en el epílogo de una sangrienta y accidentada persecución, ayer poco después del mediodía automovilistas que transitaban por el bulevar Hidalgo fueron testigos de otra acción que los aterrorizó al verse en medio de un tiroteo. 

Testigos refieren que vehículos militares iban en persecución de una camioneta pick up negra cuyos ocupantes se internaron con la unidad al motel Plaza en cuyo estacionamiento quedó embancada. 

De inmediato el tramo que comprende del distribuidor vial hasta frente las instalaciones de la Policía Federal se convirtió en un área donde prevalecía situación de riesgo extremo. Se escuchaban detonaciones mezcladas con el rechinar de las llantas de los vehículos. 

A esa hora el bulevar Hidalgo alcanza su más alta afluencia vehicular por ser el paso natural hacia áreas comerciales, sectores residenciales y parques industriales. Al lugar asistieron paramédicos de Protección Civil quienes trasladaron al Hospital General a un civil que se identificó como Jorge Arturo Martínez Ramírez, de 29 años, residente en Loma Real de Jarachina, el cual presentaba 3 impactos de bala, uno en la cara con salida en el pómulo izquierdo, otro en el brazo del mismo lado y uno más en el abdomen. Mientras que militares y policías-militares, resguardaban el área, sin que se cerrara a la circulación el bulevar. 

Cabe señalar que en el traslado del herido, la ambulancia fue custodiada por patrullas militares. Hasta ayer no se había informado oficialmente nada de lo ocurrido. 

Los militares acordonaron el lugar e impidieron el acceso a los medios, cuyos representantes a distancia captaron algunas imágenes. Un fiscal y personal de la unidad de Servicios Periciales de la PGR, acudieron al escenario donde fijaron las evidencias para luego levantarlas cumpliendo con el protocolo que se refiere a la cadena de custodia. 

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