Río Bravo

Festejan a Cristo Rey con misa y ameno convivio

Recuerdan a los ‘‘Cristeros’’ que eran perseguidos por el gobierno y se levantaron en armas por no dejarlos tener culto en sus casas

  • Por: POR ÓSCAR ALVIZO
  • 25 NOVIEMBRE 2015 - .
  • COMPARTIR
Thumbnail

Católicos riobravenses celebraron la tradicional misa de Cristo Rey, el domingo pasado.

Con una misa y posteriormente un ameno convivio, habitantes del poblado La Soledad o brecha 128, ubicado al oriente del municipio, se celebró el tradicional festejo a Cristo Rey, su santo patrono. La misa fue oficiada por el presbítero Benito Rivera Ojeda para recordar a los llamados ‘cristeros’ de los años 20 del siglo pasado. 

CAUSAS DE LA GUERRA DE LOS CRISTEROS 

El gobierno por medio de la Ley Calles pretendía limitar el número de sacerdotes por habitante y tener una mayor injerencia en los asuntos internos de la Iglesia Católica No se le reconocía personalidad jurídica propia a la iglesia católica ni a ninguna religión, los actos de culto sólo podían hacerse en los templos y con un permiso por parte del gobierno, además se prohibió cualquier tipo de educación con carácter religioso. 

Inició justamente porque el gobierno del general Plutarco Elías Calles quiso hacer reformas al Artículo 130 de la Constitución, persiguiendo a la Iglesia Católica en general y, además, haciendo que todo aquel sacerdote que quisiera ejercer, tuviera que ser mexicano de manera obligatoria. El gobierno persiguió a los cristeros y consideró ilegales los actos de culto realizados fuera de los templos encarcelando y fusilando a los transgresores. 

CONSECUENCIAS

Los obispos mexicanos tomaron la decisión de suspender los cultos en los templos y autorizaron que los cultos pudieran realizarse en casas particulares. Creyentes se levantaran en armas como protesta en contra del gobierno. 

Los obispos llegaron a un arreglo con el gobierno en el sentido de reanudar los cultos, calmar a los insurrectos y a cambio el gobierno dejaría de inmiscuirse en los asuntos internos de la Iglesia a la que no se le reconocía de todas formas personalidad jurídica alguna y tampoco se permitió (al menos oficialmente) la existencia de escuelas confesionales. 

La guerra cristera trajo como consecuencia la muerte de más personas que durante la Revolución Mexicana, (millón y medio de muertos) y una profunda división entre la población.  

DEJA TU COMENTARIO

MÁS EN LA TARDE

LA TARDE RECOMIENDA