Cómo hacer nieve de mango

Si tienes antojo de un postre refrescante, pero ya quieres variar el sabor de la tradicional nieve de limón, en Menú te traemos una receta con un ingrediente tropical de temporada que puedes incluir en tu preparación, la cual también podrás usar para aderezar platillos como waffles o incluso bananas split, recuerda que el límite es tu imaginación.

Aunque si lo que buscas es cuidar tu figura, también puedes comer esta receta de nieve de mango sola, ya que al no contener una materia grasa como la tendría un helado, aporta menos calorías. Además, el mango contribuye a tener una buena salud en diversos aspectos, pues de acuerdo con un artículo publicado en la revista Nutrición Hospitalaria, dentro de sus beneficios destacan la regulación del metabolismo de nutrientes, la disminución en mediadores de inflamación e incluso la reducción del riesgo cardiovascular.

Y lo mejor es que esta fruta dulce, ovalada y amarilla en la mayoría de sus variedades, es muy apetitosa, por ello según El pequeño Larousse Gastronomique en español, los mangos son empleados en la elaboración de nieves, helados, confituras, mermeladas y jaleas, aunque en México también es común comerlos en chamoyadas y con chilito en polvo, así que esta es otra opción que tienes para acompañar esta exquisita receta de nieve de mango, que a continuación adjuntamos para ti.

INGREDIENTES:

-1 kilo de mango

-1 taza y media de agua

-3/4 de taza de azúcar

-1 naranja

-1 limón

-Chile en polvo y chamoy (opcional)

-Sal al gusto

MODO DE PREPARACIÓN

Lo primero que tienes que hacer es quitarle toda la pulpa a los mangos y picarla en cubitos, después reservar por mínimo 6 horas en el congelador. Guárdala en una bolsa de cierre, o bien en un recipiente cubierto de aluminio.

Después coloca el azúcar y el agua en una cacerola y calienta a flama media, revuelve hasta que notes que el azúcar se haya disuelto. Déjalo hervir por tres minutos y retira del fuego. Déjalo enfriar y resérvalo.

Ya que pasaron las 6 horas saca el mango del congelador y colócalo en un procesador de alimentos o bien en una licuadora, agrega poco a poco el jarabe que dejaste enfriar y el jugo de un limón y una naranja. Muele un poco y pon una pizca de sal, posteriormente sigue moliendo hasta obtener una mezcla uniforme. Coloca esa mezcla en un recipiente que puedas meter al congelador y déjala ahí por 4 horas. La ventaja de esta receta es que gracias al jarabe no será necesario que estés moviendo tu nieve cada cierto tiempo, pues este va a regular la cantidad de cristales que se formen en la parte superior de la preparación.

Por último decora con chamoy casero y chilito en polvo, aunque si lo deseas también puedes comer la nieve de mango sola; en cualquier caso el resultado será dulce y refrescante.