¡No le soplen…!

“El puente negro”, ícono representativo de la ciudad, se sostiene de puro milagro, ya su madera se encuentra podrida y en muy mal estado, además de que tiene una peligrosa curvatura en el centro. Debajo de este puente la madera que lo sostiene está totalmente dañada, se aprecia madera rota, que en cualquier momento podría caer. Es este el paso obligado de cientos de familias que salen a ganarse el pan diariamente, las cuales viven en las colonias cercanas.

Al respecto la señora Rita García residente de la colonia Invasión Anzaldúas, expresó: 

“La verdad si hay un poco de temor al ver las condiciones en las que está el puente, yo por ejemplo paso lo más rápido que puedo, por miedo de que caiga, y mire como se tambalea ya, esto se ha vuelto muy peligroso, Dios no lo quiera se vaya a caer con uno arriba, ¡imagínese! ¿Qué vamos a hacer? necesitamos una solución para esto, es muy peligroso”, dijo. 

Cabe señalar que por este puente también pasan niños, hombres y mujeres de la tercera edad, es urgente que las autoridades correspondientes las cuales se miran negligentes ante esta situación, a la brevedad posible brinden una solución a este problema, antes de que haya víctimas que lamentar.