Madre e hija en compañía de un relojero, muy temprano y en domingo escandalizaban en pleno centro de la ciudad, por lo que comerciantes del sector solicitaron con urgencia la presencia policíaca.
En esta ocasión la reacción de la autoridad fue oportuna y elementos policíacos de proximidad acudieron y en el acto detuvieron a Ángel N, de 58 años, de oficio relojero, quien discutía acaloradamente con sus acompañantes, Ocabeth N., de 20 años y la progenitora de ésta de nombre Lucrecia N.
Los tres se encontraban bajo los influjos del alcohol, escandalizando en un sector bastante concurrido en una mañana dominguera.
Inmediatamente los policías procedieron al arresto de madre e hija y del relojero a quienes pusieron a disposición del juez calificador.
Los tres podrían pagar una sanción administrativa o de lo contrario cumplir con un arresto de 36 horas.