Se trata de los más grandes primates vivos que habitan esta tierra. Lamentablemente llevan mucho tiempo en peligro de extinción, producto de la caza furtiva, la destrucción de su hábitat y la mano del ser humano.
A pesar de las diferencias, su ADN es un 97-98% idéntico al de una persona, cifra solo superada por el chimpancé. Así como en los humanos, sus muertes también son lloradas.
Y esta es una de las más dolorosas: Ya que a sus 42 años, ha fallecido Brutus. Es uno de los gorilas más icónicos, perteneciente al zoológico de Arkansas, donde maravillaba a todos sus espectadores. Será recordado con mucho cariño, el reino animal extrañará su particular carisma. Hasta siempre.