Los menores son presa fácil de los enervantes

Corren el riesgo de desarrollar una adicción durante la adolescencia, en la etapa de experimentación, donde son más susceptibles a probar diversas sustancias

Las adicciones representan uno de los problemas más graves que enfrenta nuestra sociedad, particularmente cuando afectan a los menores, quienes constituyen el futuro de la comunidad. Según datos proporcionados por el Centro de Integración Juvenil (CIJ), los jóvenes corren un riesgo latente de desarrollar una adicción durante la adolescencia, una etapa conocida como la etapa de experimentación, donde los menores son más susceptibles a ser influenciados por su entorno y a probar diversas sustancias. Este riesgo se ve, especialmente, amplificado por sustancias lícitas, como el alcohol o el cigarro, cuya normalización en la sociedad puede llevar a los jóvenes a considerarlas inofensivas, sin conocer los efectos a largo plazo que pueden tener.

La maestra Cinthia Colin Franco, directora del CIJ, explica que la adolescencia, además de ser una etapa de desarrollo y autoconocimiento, es también una de las más riesgosas en cuanto al inicio de las adicciones. Según la maestra, los adolescentes buscan formar su identidad y, en este proceso, pueden verse atraídos por comportamientos que comprometen su bienestar. "Es un proceso en el que el menor busca formar una personalidad y podría incluir este tipo de comportamientos nocivos a su identidad", comenta la directora.

Uno de los principales factores que señala la maestra Colin es el vapeo o cigarro electrónico, una sustancia que ha ganado popularidad entre los jóvenes y que, aunque muchos consideran menos dañina que los cigarrillos tradicionales, se ha convertido en un puente hacia el tabaquismo. La directora del CIJ advierte que el consumo de vapeo puede desencadenar el uso de otras sustancias, como la marihuana, y que, si no se interviene a tiempo, el daño puede ser irreversible. "El vape es uno de los puentes para una gran cantidad de jóvenes al tabaquismo, un proceso que puede escalar hasta el consumo de marihuana, de no ser cortado a tiempo", explica la maestra Colin.

La Importancia de la Prevención Temprana

La prevención es la clave para evitar que los jóvenes caigan en un círculo vicioso de adicciones. Según la maestra Colin, la intervención desde edades tempranas es esencial para impedir que la experimentación con sustancias se convierta en un hábito. "Si no se interviene desde edades tempranas, entonces, sí, progresivamente va consumiéndolo hasta convertirse en un hábito. Es muy importante intervenir en esa etapa temprana de experimentar, y no distraerlo, sino canalizarlo hacia el círculo virtuoso y no al círculo vicioso. Tú decides, es libre albedrío, pero si lo inducimos sería al deporte, para que tenga una dieta, para que se relacione mejor con su entorno, su familia y con él mismo", señala la directora.

El enfoque del CIJ se basa en involucrar a los jóvenes, desde una etapa temprana, utilizando estrategias de sensibilización en las instituciones educativas. A través de dinámicas y conversaciones, en las que participan voluntarios, -en su mayoría universitarios-, el CIJ busca educar a los adolescentes sobre los peligros de las adicciones. Estas charlas y actividades no sólo ofrecen información, sino que también fomentan un ambiente de confianza, en el cual los jóvenes pueden expresar sus dudas y preocupaciones. La cercanía generacional entre los voluntarios y los estudiantes permite una comunicación más abierta y efectiva.


El Papel del Deporte y las Actividades Saludables.

Además de la prevención informativa, la maestra Colin destaca la importancia de canalizar la energía de los adolescentes hacia actividades positivas, como el deporte. Según la directora del CIJ, el deporte no solo ayuda a reducir el riesgo de adicciones, sino que también contribuye al desarrollo de una vida más saludable y equilibrada. "Si canalizamos hacia el deporte, estamos promoviendo una actividad que no solo favorece la salud física, sino también la relación con el entorno y la familia, y sobre todo con uno mismo", comenta.

El deporte, como una vía para mejorar la salud mental y emocional, se convierte en una herramienta poderosa para los jóvenes. Además, fomenta la disciplina y fortalece la autoestima, dos aspectos que pueden ser determinantes en la toma de decisiones a lo largo de la vida.


Zonas de Alto Riesgo y la Intervención Comunitaria

La maestra Colin también hace un llamado a la atención sobre las zonas más vulnerables a las adicciones, como aquellas que presentan altos índices de inseguridad. Según la directora del CIJ, las colonias ubicadas en las orillas del municipio y relativamente aisladas.

"Las colonias que presentan índices de inseguridad son las más propensas a tener un mayor índice de adicción. Colonias como San Valentín, Rincón de las Flores, Juárez 5, etc., son algunas de las más vulnerables, solo por mencionar algunas.", afirma Colin. Esto subraya la necesidad de una intervención integral que involucre tanto a las instituciones como a las comunidades locales, creando redes de apoyo que brinden alternativas saludables para los jóvenes.