Han pasado ya tres semanas de saturación en las casas de asistencia para migrantes de Reynosa, con un nivel de ocupación mayor a las mil 300 personas incluyendo mujeres embarazadas y niños, lo que mantiene en lista de espera a decenas de familias que pernoctan en las calles.
En la Plaza de la República se evidencia la necesidad de abrir un nuevo espacio, diferente al de Senda de Vida o al de Nuestra Señora de Guadalupe.
Debido a que el campamento improvisado ahí, ya no tiene capacidad para más, y todos los días siguen llegando.
“No podemos abrir espacios a nuevos migrantes, los que están aquí, esperan una respuesta a su trámite de asilo, no sabemos cuánto tiempo llevará, por eso cuando alguien sale, se abren espacios, pero si hay que dar prioridad a las mujeres embarazadas, por supuesto también a los menores, a las familias”, mencionó Héctor Silva, titular del refugio Senda de Vida.
Aunque desde marzo del 2020 cuando inició la contingencia por Covid-19 los dos albergues de Reynosa han estado con capacidad alta, las últimas tres semanas han impuesto un nuevo récord, aún con la extensión de nuevas áreas y sitios.
Por lo que Silva agregó; “En los primeros meses de este año teníamos a 300 o 400 personas, luego cuando se construyó atrás la parte para las casas de campaña pudimos abrir a otras personas, llegando a mil, pero hemos tenido que adaptar todo para captar a la mayor población posible, los patios, los pasillos, cualquier lugar al aire libre, aparte guardar la sana distancia, lo que eso implica para evitar contagios”.
Refirió que los migrantes provienen en su mayoría de Honduras y El Salvador.
Por su parte, Catalina Carmona, administradora del refugio Nuestra Señora de Guadalupe de la colonia Aquiles Serdán explicó que los extranjeros ascienden a más de 100, cuando en el 2020 la población apenas se ubicaba entre 50 y 70 personas.
Todas bajo cuidados y seguimiento médico reciben alimento, hospedaje y ropa.