Limpian basura espacial

La presencia de restos del artefacto aeroespacial en territorio mexicano generó preocupación entre los habitantes del sector

Matamoros, Tamps.

Elementos de la Dirección de Protección Civil, en coordinación con personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), acudieron al ejido La Burrita para iniciar con el retiro de fragmentos del cohete Starship, lanzado por la empresa SpaceX, que explotó la noche del pasado miércoles durante una de sus pruebas desde las instalaciones ubicadas en Boca Chica, Texas, a escasos kilómetros de la frontera con México.

La presencia de restos del artefacto aeroespacial en territorio mexicano generó preocupación entre los habitantes del sector, sin embargo, autoridades locales confirmaron que no se reportaron daños materiales ni afectaciones a viviendas cercanas al área donde cayeron los escombros, pese a la magnitud del estallido.

Los fragmentos fueron asegurados y trasladados por una unidad de Protección Civil estatal, y ahora se encuentran bajo resguardo de las autoridades correspondientes, quienes determinarán su manejo conforme a los protocolos de seguridad y jurisdicción internacional.

"El operativo se llevó a cabo de forma coordinada y por ahora no hay indicios de riesgo para la población. Se mantendrá vigilancia en la zona en caso de que aparezcan nuevos restos", informaron voceros de Protección Civil.

Ésta no es la primera ocasión en que materiales asociados con los lanzamientos de SpaceX alcanzan territorio mexicano. Habitantes del norte de Tamaulipas, principalmente de comunidades rurales, como La Burrita, han sido testigos en otras ocasiones de vibraciones, ruidos o presencia de fragmentos derivados de estas pruebas aeroespaciales, por lo que las autoridades locales insisten en la necesidad de mantener canales de comunicación directa con la empresa y el gobierno estadounidense.

Mientras tanto, los pobladores del ejido reiteraron su inquietud por los posibles efectos que este tipo de incidentes pueda tener en su entorno. "Por fortuna, esta vez no hubo consecuencias, pero sí escuchamos un fuerte estruendo y sentimos cómo vibraban las ventanas", relató uno de los residentes.

Se espera que en los próximos días se emita un informe técnico más detallado por parte de las autoridades mexicanas, así como una postura oficial por parte de la empresa SpaceX.