´Ahora o nunca´, migrantes desesperados cruzan el río

Del lado estadounidense, seguían su camino entre alambres de púas, muchos se entregan a las autoridades, antes de finalizar el Título 42

Associated Press

Matamoros / Brownsville

Muchos migrantes cruzaban la frontera sur de Estados Unidos el jueves con la esperanza de ingresar al país antes de que se levanten las restricciones al asilo relacionadas con la pandemia, un cambio que amenaza con colocar una presión sin precedentes en el golpeado sistema migratorio del país.

El inminente final de las reglas conocidas como Título 42 desató temor entre los migrantes de que el cambio les hará más difícil quedarse en Estados Unidos. Albino León, de 51 años, dijo que el fin del Título 42 impulsó a su familia a emprender el viaje.

Con los cambios que están haciendo en las leyes, es ahora o nunca, manifestó León, que voló a México desde Colombia y superó un primer muro fronterizo para llegar a suelo estadounidense.

Con el fin de la medida programado para la medianoche, los migrantes que aguardaban en México se quitaron la ropa antes de descender por la inclinada orilla hacia el río Bravo (o Grande), aferrándose a bolsas de plásticos repletas de ropa. Un hombre llevaba a un bebé dentro de una maleta abierta sobre su cabeza.

Del lado estadounidense del río, los migrantes se volvían a poner la ropa secas y seguían su camino entre alambres de púas. Muchos se entregaban de inmediato a las autoridades y esperaban ser puestos en libertad en lo que sus casos avanzan en las copadas cortes migratorias, lo cual suele tomar varios años.

De momento se desconoce cuántos migrantes se movilizaron o cuánto duraría la oleada. Pero hacia la tarde del jueves el flujo parecía desacelerarse en ciertos lugares. Sin embargo, está por verse si el número de cruces aumentará nuevamente luego de que las restricciones expiren.

Un funcionario federal estadounidense reportó que los encuentros diarios alcanzaron los 10.000 el martes, casi el doble que el nivel de marzo y apenas por debajo de los 11.000 que las autoridades han dicho que es el límite máximo que prevén una vez que se levante el Título 42.

"Nuestros autobuses están llenos. Nuestros aviones están llenos", dijo Pedro Cardenas, comisionado de la ciudad de Brownsville, Texas, limítrofe con Matamoros, México.

El gobierno del presidente Joe Biden ha estado revelando medidas con las que se reemplazará el llamado Título 42, un programa que desde marzo de 2020 permitía a los agentes fronterizos enviar rápidamente de regreso a los solicitantes de asilo hacia el otro lado de la frontera con el argumento de evitar la propagación del COVID-19.

NUEVAS MEDIDAS LIMITAN CRUCES

Las nuevas medidas restringen los cruces ilegales al tiempo que también establecen vías legales para los migrantes que presenten solicitudes por internet, consigan un patrocinador y se sometan a revisiones de antecedentes. En caso de tener éxito, las reformas podrían alterar por completo la manera en que los migrantes llegan a la frontera sur de Estados Unidos.

Los grupos defensores de los inmigrantes han amenazado con emprender acciones judiciales. Y los migrantes que huyen de la pobreza, las pandillas y la persecución en sus países de origen siguen desesperados por llegar a territorio estadounidense a cualquier precio.

El venezolano William Contreras dijo que el Título 42 fue benéfico para las personas de su país. Escuchó que muchos de los migrantes que llegaron antes que él fueron dejados en libertad dentro de Estados Unidos.

A los agentes se les pidió que comenzaran con las liberaciones en todas las zonas en donde los centros de detención estuvieran al 125% de su capacidad o en donde el tiempo en custodia rebasara las 60 horas.