Imposibilitarán obtener el asilo

Mandarán migrantes a México para que esperen audiencias en las cortes de EU

McAllen, Tx.

Las personas en busca de asilo que crucen la frontera por Arizona ahora serán trasladadas por las autoridades inmigratorias a Texas, desde donde pueden ser enviadas a México para que esperen sus audiencias en las cortes de inmigración de Estados Unidos.

A donde han arribado más familias migrantes, muchas de ellas interesadas en obtener asilo es en las ciudades del Valle del Río Grande, El Paso, y Yuma, Arizona.

El gobierno dijo que su muy criticado programa conocido coloquialmente como “permanecer en México”, y oficialmente como Protocolos de Protección de Migrantes, ya está en vigor en toda la frontera.

Los críticos dicen que la medida prácticamente imposibilita obtener asilo en Estados Unidos.

“A expensas de los contribuyentes, con esta decisión se transportará a la gente que desea obtener asilo en Arizona más de 300 millas (480 kilómetros) a una ciudad mexicana peligrosa, donde es difícil tener acceso a servicios legales y donde pocas personas cuentan con el respaldo de sus familias y sus comunidades”, dijo Katie Sharar, directora de comunicaciones en la Iniciativa Kino para la Frontera, una organización católica que ayuda a migrantes.

Las autoridades dicen que el programa ha ayudado a reducir drásticamente el número de migrantes que llegan a la frontera.

El programa “funciona y es un factor que revolucionó la manera de afrontar la actual crisis fronteriza”, afirmó Chad Wolf, secretario interino de Seguridad Nacional, en un tuit el viernes.

La noticia de que las autoridades planean trasladar a migrantes de Arizona a El Paso y a otras ciudades de El Valle de Río Grande, para ser enviados a México fue reportada en primera instancia por el periódico The Washington Post. Los migrantes aprehendidos en Arizona también serán sujetos al programa.

Los Protocolos de Protección de Migrantes comenzaron a operar en enero y han obligado a más 55,000 solicitantes de asilo a esperar en México. Con frecuencia aguardan en campamentos sucios, y muchos han sido víctimas de secuestro, robo o extorsión.