Río Bravo

Vence enfermedad; da ejemplo de vida

Doña Marcela Reyna Cruz sigue vendiendo zacahuil los domingos en el tianguis

  • Por: LA TARDE / STAFF
  • 18 ABRIL 2018 - .
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Todos los domingos prepara zacahuil para vender en el tianguis de “el Riel”.

Doña Marcela Reyna Cruz de 46  años de edad, originaria de un ranchito de Veracruz, residente de la colonia Morelos, llegó a la ciudad de Río Bravo hace 13 años, acompañada de su esposo y sus 3 hijos, en busca de un mejor vivir, en su lugar de origen no hay fuentes de empleo, y vinieron a probar suerte por estos rumbos, llegaron tan solo con un costal de ropa y muchas ilusiones.

Fue entonces cuando decide vender tacos de diferentes guisos, pero recuerda que el primer día no vendió absolutamente nada, se desanimó, pero no se dio por vencida, hizo donas, y esas si se vendieron, pero lo que se ganaba vendiendo esto, no era suficiente, así que empieza a vender bolis, esto si le costeaba, pero era muy cansado, pues tenía que recorrer las calles de la ciudad bajo los fuertes rayos del sol. 

Su cuñada le aconseja que venda zacahuil, un alimento a base de maíz quebrado y carne de cerdo, se puede definir como un tamal grande, en Veracruz es muy consumido, así que aceptó el reto, y empezó a prepararlo hasta que perfeccionó su técnica y empezó a venderlo.

De pronto Marcela deja de vender su zacahuil hace dos años, a causa de que enferma gravemente de hidrocefalia, es el aumento anormal de la cantidad de líquido cefalorraquídeo en el cerebro, los dolores de cabeza eran muy intensos, consultó varios doctores, hasta fue a dar al Hospital General y sólo le daban medicamento para migrañas, pero ese no era el problema, cuando por fin una doctora le pone la atención correspondiente, le manda hacer estudios, se da cuenta de lo que realmente tenía. 

La doctora manda inmediatamente a que sea operada, la operación resulta ser todo un éxito, pues no le daban esperanzas a su marido de que ella quedara bien. La vida de Doña Marcela es realmente un milagro, ella le da gracias a Dios por la oportunidad que le ha dado de seguir viviendo y luchando por salir adelante, de valorar aún más lo que tiene como una familia que en todo tiempo ha estado a su lado y a su esposo que siempre le ha demostrado lo mucho que la ama, se dice feliz por esta oportunidad de respirar, levantarse y ver la luz del día.

Actualmente sigue vendiendo zacahuil los domingos en el tianguis de “el Riel”, y le dice a todos los jóvenes que en Río Bravo, hay oportunidades, sino trabaja la gente es porque no quiere, poco a poco se puede salir adelante, trabajando honestamente, no importando las inclemencias que la vida ponga, siempre sale el sol, dice: “Dios es bueno”, concluye.


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