Otra mortandad de peces en el Anzaldúas

La mortandad de peces en el Anzaldúas se hizo presente desde las primeras horas del jueves.

Aunque desde la tarde del miércoles, usuarios de redes sociales alertaron el brote de peces muertos a la altura de La Nopalera, en el municipio de Reynosa, para las primeras horas del jueves, ya se avistaban los primeros peces en Río Bravo. 

Fue a lo largo de todo el canal Anzaldúas, el cual pasa por el extremo sur de la zona urbana de Río Bravo, que se apreciaban flotando entre el agua, centenares, tal vez miles de pececillos, los cuales han muerto por causas aún no determinadas. 

A esta incertidumbre abonan autoridades como la Comisión Nacional del Agua a través de la Jefatura de Distrito 025, la cual se encuentra acéfala desde la renuncia del ex titular Claudio Medina Salazar, dependencia que no ha emitido información oficial al respecto.

Tampoco la Comisión Estatal de Aguas de Tamaulipas, hasta la tarde de ayer, no daba información oficial sobre este hecho, en donde nuevamente los usuarios de la red de agua potable seremos los más afectados, pues en el primer incidente de este tipo que tuvo lugar también en este 2015, la calidad del agua se vio comprometida; igualmente los pescadores de comunidades aledañas o cercanas al canal son los más afectados, mientras no se libere agua canal arriba para limpiar el dren o se recolecten los peces muertos. 

¿BROTARON EN ESTE PUNTO O PROVIENEN DE REYNOSA? 

Una incógnita que impera además de las razones por la que mueren estos peces, es si los animales acuáticos, están muriendo en el tramo que pasa por Río Bravo o provienen de la zona de Reynosa. 

En cuanto a la causa de la muerte, la vez anterior, la versión oficial de Conagua, fue que el caudal del Anzaldúas se estancó, provocando que se acabara el oxigeno al no haber agua corriente, lo que desató la mortandad de los peces. Sobra señalar que este tipo de pescado, no debe ser consumido por el ser humano, pues se encuentra en un entorno insalubre.