¡Le dicen adiós!

Ni Agustín Lara, María Félix, Cantinflas o Gabriel García Márquez lograron lo que Juan Gabriel en dos días: ser despedido por poco más de 700 mil personas en el máximo recinto de la cultura en México, el Palacio de Bellas Artes, según cifras oficiales del INBA.

Durante poco más de 28 horas, de las 16:45 horas del lunes hasta las 21:30 de ayer, personas de todas las edades y estratos sociales se formaron pacientemente sobre Avenida Juárez y en la Alameda para ver por unos cuantos segundos la urna con las cenizas de su ídolo.

Contrario al lunes, cuando la gente esperó hasta 12 horas e incluso acampó desde la madrugada para entrar al inmueble, el movimiento ayer fue mucho más ágil, al tardarse, en promedio, entre una y dos horas y media para pasar al interior del Palacio.

Fueron en total 16 artistas los que actuaron en el vestíbulo del inmueble de mármol y en la explanada principal a lo largo de la jornada. Entre éstos destacaron Lucía Méndez, el Mariachi Gama Mil, Pablo Montero, Fernando de la Mora y Aída Cuevas.

Asimismo, personalidades del medio como los compositores Martín Urieta y Roberto Cantoral Zucci; Emir y Humberto Pabón, del grupo Cañaveral, Diego Verdaguer, Daniela Romo, Poncho Lizárraga, Laura Zapata, Olivia Gorra y Mariana Seonae hicieron guardia ante la urna. Iván Gabriel, hijo mayor de Juanga, se presentó pasadas las 18:00 horas de ayer y se mostró más sereno que el lunes. Conversó durante largo rato con Arturo, el hermano menor de la también fallecida Rocío Dúrcal.

Según consideraciones del INBA, las canciones que más se cantaron durante el magno homenaje fueron “Amor Eterno”, “Hasta Que Te Conocí” y “Se Me Olvidó Otra Vez”, mientras que 18 arreglos florales y coronas adornaron la entrada del recinto.

LE CANTAN SUS FANS

Como ayer por la mañana fueron pocos los artistas que rindieron homenaje musical a Juan Gabriel, los fans tuvieron oportunidad de cantarle a su ídolo, como fue el caso de Pablo Evangelista  Arellano.

Proveniente de Ecatepec, el comerciante sorprendió a todos los dolientes que estaban por ver la urna, pues durante un silencio en el recinto aprovechó para entonar “Abrázame Muy Fuerte”.

“Soy un admirador de él, no un imitador. Su muerte me impactó y me dolió. Él me dejó la alegría, el gusto y la esperanza de no vivir sólo por vivir. Hay que disfrutar cada momento.

“Por eso le dediqué esa canción, porque le quería agradecer  lo mismo que dice esa letra: todo lo que nos ha dado”, señaló Arellano, quien entre sus amigos es conocido como José Gabriel, en honor a José Alfredo Jiménez y Juan Gabriel. 

Tras su interpretación, por la cual le dieron unos segundos más frente a la urna con las cenizas, la familia del compositor y el resto de fans presentes aplaudieron y alabaron su tesitura de voz y varios le pidieron fotografías y selfies.