Reportan intoxicados en municipios de Chiapas

San Cristóbal de las Casas

Menores de tres a cinco años de edad, que estudian en el Jardín de Niños Federico Froebel, fueron trasladados al Centro de Salud de Yajalón, en el norte de Chiapas, luego de que presentaran nauseas, vómitos y ámpulas en la boca, lengua y manos, denunciaron los padres de familia.

En el Centro de Salud, los menores fueron atendidos por médicos, donde sacaron muestras de sangre, para conocer qué es lo que les afectó a los estudiantes del plantel.

Además otro grupo de menores de edad de la comunidad La Laguna, también requirió de atención médica.

Los maestros suspendieron clases en el preescolar hasta que se mejore la salud de los menores, pero mientras tanto, se realizarán acciones de limpieza en las instalaciones educativas.

Los padres de familia dijeron que sus hijos presentaron fiebre, dolor de garganta, dolor en coyunturas, salpullido con puntitos rojos que evolucionan como ampollas y ulceras en la boca que provoca dolor a los niños.

La autoridades del centro médico explicaron que no todos los niños presentan los mismos síntomas.

El Centro de Salud envío muestras a laboratorio, para conocer las causas de esta enfermedad en los niños.

En tanto, en el municipio de La Trinitaria, un grupo de 40 trabajadores de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) y de Protección Civil se intoxicaron en las recientes horas, después de consumir alimentos en un restaurante en la cabecera municipal de La Trinitaria, informaron fuentes de salud. 

Los elementos de Conafor y Protección Civil realizaban un curso para el combate de incendios forestales en la cabecera municipal de La Trinitaria, en la frontera con Guatemala.  

Sin embargo, después de comer en un restaurante de la cabecera municipal, presentaron náuseas, diarrea y dolores de cabeza y estomago. 

Después del curso, los trabajadores de Conafor y PC llegaron a comer al restaurante, donde les sirvieron tortas de carne, pero fue cinco horas después que empezaron a sentir molestias estomacales. 

De inmediato, los trabajadores de Conafor y PC acudieron a la clínica de la Secretaría de Salud ubicada en la cabecera municipal.

El personal de salud procedieron a atender a los enfermos que suministraron antibiótico. 

A la clínica llegaron por grupos de cinco a diez personas para ser atendidos de las molestias. 

El alto número de pacientes provocó que la clínica se quedará sin antibióticos, por lo que algunos de los enfermos tuvieron que costear sus medicamentos con sus recursos.  

El dueño del restaurante se deslindó y después de una supervisión en la cocina se comprobó que no había elementos contaminantes en el sitio, por lo que responsabilizó al dueño de una carnicería de haberle vendido producto en mal estado.