Lo matan pandilleros a pedradas

Crimen. Juan Antonio López Espinoza fue llevado por sus familiares a la Cruz Verde para que lo atendieran, pero falleció por un fuerte golpe en la cabeza que le fracturó el cráneo.

Monterrey

Agentes de la Policía Ministerial investigan la muerte de un hombre que fue agredido a pedradas, después de enfrentarse a golpes contra varios pandilleros, en el norte de la Ciudad.

La víctima, quien fue identificada como Juan Antonio López Espinoza, de 32 años, murió cuando era atendida en un puesto de auxilio de la Cruz Verde de Monterrey.

Los hechos fueron reportados alrededor de las 2:30 horas de ayer, en el cruce de las calles Tigris y Los Patos, en el Barrio San Luis, de Ciudad Solidaridad.

Tras ser herido, López Espinoza fue subido por sus familiares a un auto particular y llevado al puesto de la Cruz Verde de Monterrey ubicado en la Avenida Lincoln, muy cerca de su cruce con Ruiz Cortines, en donde falleció antes de ser trasladado a un hospital.

De acuerdo con testigos, la víctima presentaba un fuerte golpe en la cabeza, lo que finalmente le provocó la muerte.

"Dicen que le dejaron caer una piedra en la cabeza al sostener una riña contra unos chavos", dijo una fuente allegada a las investigaciones.

En el lugar de la agresión, agentes de la Policía Ministerial realizaron una inspección para buscar indicios de la riña.

Asimismo, los ministeriales interrogaron a vecinos del sector, pero ninguno les aportó datos que ayudaran en la investigación.

Sobre la calle Tigris, los agentes encontraron varios pedazos de bloques regados en algunos puntos, con lo que presumieron fue golpeada la víctima.

Un fiscal de Homicidios acudió a dar fe de la muerte del hombre hasta la sala de emergencia del puesto de socorro, mientras que peritos de la Procuraduría de Justicia estatal se encargaron de tomar fotografías y video del cadáver.

Luego se dirigieron hasta la escena del crimen, para recolectar las evidencias de la agresión.

Tras iniciadas las primeras investigaciones, personal del Servicio Médico Forense se encargó de llevar el cuerpo del occiso al anfiteatro del Hospital Universitario, donde quedaría en espera de ser reclamado por sus familiares.