Desolación en obras de Canal de Panamá tras desacuerdo con consorcio

El ruido de las retroexcavadoras, volquetes y transportadoras de concreto fue sustituido por el silencio, con zopilotes en el cielo como únicos testigos de esta obra que antes de la crisis que estalló el 30 de diciembre sufría un retraso de nueve meses.

La Autoridad del Canal de Panamá (ACP) confirmó este miércoles que el Grupo Unidos por el Canal de Panamá (GUPC) paralizó las obras desde esta jornada, tras fracasar las negociaciones sobre un reclamo de mil 600 millones de dólares en supuestos sobrecostos.

Cocolí, en el litoral Pacífico de Panamá, donde se construye el tercer juego de esclusas de la vía interoceánica, “es una ciudad fantasma” por la ausencia de trabajadores desde este miércoles, comentó el gerente de la ACP para este sector, Gustavo Rivas.

“Ustedes no oyen ruido, es el mejor síntoma de que una obra en construcción está o no progresando; hay desolación total”, comentó Rivas a un grupo de periodistas en un recorrido por la zona.

Hasta el 25 de noviembre pasado, el GUPC –formado por la española Sacyr, la italiana Impregilo, la belga Jan de Nul y la panameña CUSA- empleaba unos cinco mil trabajadores en Cocolí, pero luego redujo la fuerza a unos 600 hombres.

Aunque Rivas afirmó que el GUPC removió a “todos sus trabajadores de campo” a partir de este miércoles, en el recorrido por la zona se pudo observar a un puñado de obreros que realizaba labores pequeñas en algunas máquinas.

Decenas de carros volquetes, tractores y otro tipo de maquinaria fueron apostados a los lados de las obras, mientras que unas 22 grúas permanecen en el fondo de la que será la tercera esclusa del canal ampliado.

El mismo escenario de desolación se vivió en el sector de Colón, 80 kilómetros al norte de esta capital, indicó Rivas, aunque en paralelo, las operaciones del actual canal continúan de manera normal, sin entorpecerse el tránsito de barcos por la vía.

El ejecutivo lamentó que la reducción de las labores y la paralización total ocurra en estos meses de escasas o nulas lluvias en Panamá, por lo cual se prevé que será aún mayor el retraso de unos nueve meses que ya sufrían las obras antes de enero.

“Hemos perdido el verano (la época seca), hay que esperar el próximo verano”, para apurar las obras, sostuvo Rivas.

Al llamar al consorcio a reanudar los trabajos, el administrador de la ACP, Jorge Quijano, advirtió que disponen de un Plan B para finalizar en 2015 la ampliación “con o sin GUPC”.

La ampliación inició el 3 de septiembre de 2007 con un presupuesto total de cinco mil 250 millones de dólares, de los cuales, tres mil 221 millones de dólares corresponden al contrato con el GUPC para construir el carril adicional a los dos actuales. (Panamá / Notimex)