¡Vamos… vamos Rayados!

Fueron pocos pero ruidosos y sobre todo muy felices.

No llegaron ni a 200 pero los aficionados de los Rayados también celebraron en Reynosa tras la obtención del campeonato.

El Monterrey venció al América en tanda de penales y eso ocasionó que la celebración comenzara pasadas las once de la noche en el lugar de siempre, la Plaza Principal Miguel Hidalgo.

Poco a poco se fueron arrimando a fiesta, tímidamente se asomaban algunas camisetas y bufandas hasta que Mario dejó al desnudo su torso para comenzar a cantar el ¡Vamos … vamos Rayados! Fue entonces que comenzaron a aparecer más coches y familias en su mayoría nacidos en esta ciudad.

No faltó el protagonismo de algunos americanistas que pasaron en su coche para “quemar llanta” para llamar la atención, pero el berrinche fue tomado con humor por la raza de las “Rayas”.

La quinta estrella llegó para el Monterrey y en la frontera tuvo un sabor muy especial ya que el reynosense “Poncho” González estuvo en la cancha y recibió su medalla de campeón.