Aún sin identificar ahogado

La identidad del individuo que flotó el pasado jueves en el río Bravo no era aún conocida por las autoridades. Investigadores en coordinación con peritos en distintas materias llevaban a cabo una serie de diligencias con la finalidad de obtener datos que pudieran servir para conocer el origen de la persona.

Se trata de un individuo joven, de complexión regular el cual solo vestía bóxer obscuro y calcetines tipo tobilleras cortas de color negro.

Carecía de documentos que lo identificaran, por lo que peritos en fotografías, dactiloscopia, química forense se encargaban de recabar imágenes, huellas digitales y muestras orgánicas que pudieran contener el historial genético para en caso de que se requiera de la prueba de ADN para su identificación.

Conforme a lo dispuesto por las leyes sanitarias, el cuerpo podrían mantenerlo durante algún tiempo prudente en el SEMEFO en espera de que alguien acuda a identificarlo y reclamarlo, pero de lo contrario podría ser depositado en una fosa común, con todos requisitos que establece el protocolo.

Las autoridades descartaron la violencia en la muerte del individuo que se convirtió en la víctima número 13 del río Bravo en lo que va del año y el número 24 de la estadística de ahogados en general, de acuerdo a datos obtenidos en Protección Civil del municipio.