Como si el tiempo no transcurriera para los 43 estudiantes que conforman el telebachillerato en el ejido Ampliación Río Bravo, se les continúan impartiendo clases en una casa particular, gracias a las nuevas disposiciones de la Secretaría de Educación Pública lo que originó que se quedarán sin aula que les venían facilitando en uno de los salones de telesecundaria.
Y es que por más que siguen tocando puertas a nadie parece importarles lo que están pasando y la serie de carencias a las que tienen que enfrentar al carecer de todo, pues improvisaron unos bloques con tablas para acondicionarlos como mesas, donde se apoyan para su cuadernos y libros.