Rusia alista submarino capaz de lanzar misiles hipersónicos zircon

Su alcance medio es de 250 a 500 kilómetros en función de la curvatura de su trayectoria, su principal ventaja es la velocidad

La agencia rusa de noticias Tass informa de que el gobierno de Putin ha dado luz verde a la construcción de una nueva clase de submarinos, los Husky. Considerados sumergibles nucleares de ataque multipropósito, lo que realmente preocupa de los Husky no es el vehículo en sí, sino lo que llevan dentro.

Los Husky equiparán un sistema de lanzamiento compatibles con diferentes tipos de proyectil, incluidos misiles de crucero como los que Rusia ha estado empleando en Siria. La plataforma de lanzamiento soportará también los nuevos misiles Zircon, un nombre que despierta mucha preocupación entre el alto mando de otros países.

Los Zircon son misiles hipersónicos de intercepción. En otras palabras, son el equivalente moderno de un torpedo. Su alcance medio es de 250 a 500 kilómetros en función de la curvatura de su trayectoria, pero su principal ventaja es la velocidad. La primera fase del misil quema combustible convencional para aumentar la velocidad. En ese momento se activa un motor tipo scramjet que eleva la velocidad del proyectil hasta un extremo que sencillamente no es posible detenerlo.

Según fuentes rusas alcanza entre Mach 8 y Mach 10, pero la cifra parece exagerada. Análisis técnicos desde los departamentos de inteligencia occidentales indican que su velocidad real es entre cinco y seis veces la del sonido (Mach 5 a Mach 6, o lo que es lo mismo, entre 6.125 y 7.350 km/h).

En realidad da igual. Solo Mach 5 ya es suficiente como para hacer que el Zircon sea virtualmente imparable. Los sistemas de defensa antiaérea Sea Ceptor que integran los portaaviones más avanzados de la marina británica solo pueden destruir blancos por debajo de Mach 3. La marina estadounidense tiene el mismo problema, aunque también está desarrollando sus propios misiles hipersónicos.

La clase Husky de submarinos es un equivalente a la clase Virginia de la marina estadounidense. Son capaces de desplazar alrededor de 12.000 toneladas y están considerados un arma táctica, no una plataforma para el lanzamiento de misiles nucleares. Si todo va según lo previsto, el primero de estos sumergibles comenzará a construirse en 2023 y navegará en 2027.