El llanto del supuesto niño que escucharon dos amas de casa residentes en el fraccionamiento Balcones de Alcalá, cerca de unas calicheras, pudo haber sido confundido con el maullido de algún gato.

Según las apreciaciones de los elementos de Protección Civil que participaron junto con militares y marinos en la búsqueda del bebé, en ocasiones esas mascotas emiten sonidos similares a los del llanto de un niño y pudieron haberse confundido las señoras que provocaron la movilización.

“Pero era algo que no se podía pasar por alto y tomarlo a la ligera y por eso nos mantuvimos por espacio de más de dos hora en la búsqueda por los alrededores”, expresó el elemento de la brigada de rescate que acudió al llamado.

Desde las 23:00 horas del miércoles hasta las 02:45 horas del jueves, se mantuvieron en la búsqueda, pero al no escuchar los llantos, ni ubicar nada que se semejara a un bebé en el lugar, suspendieron la búsqueda.

Más tarde regresarían, solo para confirmar que todo había sido producto de la imaginación y descartar la posibilidad de que en la calichera haya sido abandonado un bebé, como se suponía.