José Francisco Garza Castro, uno de los trabajadores que participaron en la reparación que tuvo que hacerse para que nuevamente volvieran a normalizarse las cosas frente al Centro de Salud Rector en donde se instaló una señalización electrónica, dijo que “desafortunadamente hay varios conductores automotrices que no respetan a los peatones y todavía no se acostumbran a manejar a velocidad de 40 o 50 kilómetros por hora sino por el contrario, le dan al acelerador con todo”.
Ahí se perjudicó una barda del área dispuesta para personas discapacitadas y con el golpe del vehículo que se impactó en ella, se originó problema en el semáforo pero las cosas ya están bien y volvió a funcionar sin contratiempos.
No les importa atropellar a quienes tienen forzosamente que cruzar avenidas y bulevares como el Morelos o el Hidalgo, Primero están ellos y después los demás pues con su actuar así queda de manifiesto, comentó Garza Castro. (Por Rubén Hernández Olmeda / ruben.hernandez@latarde.com.mx)