María Celestina Montoya, originaria del estado de Zacatecas, dice que está aprendiendo a leer, escribir e iniciar la escuela primaria para enseñar a otras personas que por alguna causa no estudiaron.

Dice ser cristiana y quiere prepararse para “llevarles la palabra de Dios a quienes como yo son creyentes. Tengo 64 años de edad y hasta ahora me decidí a estudiar porque estoy convencida de que para todo hay que tener conocimiento y más cuando se trata de conseguir un trabajo a esta edad”.

Añade que hace 40 años llegó a esta ciudad y que supo sacar adelante a sus cuatro hijos de los cuales uno falleció.

Hasta ahora es cuando se interesó por prepararse, “ahora sé que es bueno aprender porque nunca es tarde para lograrlo y yo ya estoy aprovechando los programas del ITEA e invito a aquellas personas que no tuvieron el tiempo suficiente para ir a una escuela, a que se integren al Instituto Tamaulipeco para la Educación de los Adultos en donde encontrarán lo necesario para alcanzar su meta”.