Procesan a presunto homicida

Existen versiones que hacen suponer que él es el causante del crimen, aunque niega los hechos y señala a otras personas

El presunto homicida detenido por las autoridades armado con un cuchillo, se declaró inocente señalando que a su amigo de secundaria lo asesinaron dos sujeto en su presencia, por andar con una mujer casada y se encuentra amenazado. 

El detenido Magdiel Porfirio Lagunes Santander, de 24 años, señalado como homicida de Ricardo Ramos Jiménez, quien apareció sin vida flotando en el caudal del canal Rodhe frente centro recreativo Quinta Blazer esto el pasado viernes, rindió su declaración. 

El cadáver del ahora occiso fue examinado en las instalaciones del anfiteatro por los médicos legistas, quienes informaron que el cuerpo presentaba seis heridas en su humanidad, la cuales se ubicaban en el rostro, abdomen y tórax, estas últimas fueron las que le provocaron la muerte al dañarle órganos vitales. 

Los padres de Ramos Jiménez al ser avisados por las autoridades investigadoras declararon a los agentes federales comisionados al grupo de homicidios que su hijo antes de salir de su vivienda el día de su desaparición les comentó que iría a un centro comercial, donde se había quedado de ver con su amigo Magdiel. 

Los uniformados al tener conocimiento de esto se dirigieron al domicilio del ahora detenido entrevistándose con Lagunes Santander, quien portaba una navaja por lo que fue detenido por portación de arma blanca, siendo llevado a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia, en donde fue cuestionado con relación al posible homicidio. 

En una primera declaración Magdiel Porfirio Lagunes Santander confesó haber asesinado a su amigo de secundaria por un adeudo de dinero, expresando que efectivamente recogió a Ricardo en el centro comercial Soriana Hidalgo, esto seria como las 19:30 horas. 

Posteriormente se dirigieron al domicilio del homicida en el fraccionamiento Fundadores al estar a bordo de su carro Toyota se inició un discusión por lo que le pago los seis mil pesos que le debía, pero el ahora occiso le dijo que ya eran nueve mil por los intereses, cuando el problema se salió de control hasta llegar a los golpes fue cuando se defendió sacando un cuchillo y lo apuñalado en diversas ocasiones, provocando la muerte; para deshacerse del cuerpo optó por tirarlo en el canal Rodhe a la altura del lienzo charro. 

El presunto homicida Magdiel Porfirio Lagunes Santander al estar en el juzgado señaló ser inocente, citando que en la primera declaración fue presionado e intimidado por los agentes federales para que diera esta declaración para resolver el homicidio. 

Dijo que los responsables de la muerte fueron dos sujetos que andaban abordo de una camioneta pick up blanca que le cerraron el paso al ir transitando por el libramiento Monterrey a la altura de la Empresa Titsa. 

Estos los obligaron a ingresar al fraccionamiento Fundadores, en donde los dos asesinos golpearon y acuchillaron a su amigo Ricardo en el interior de su carro, del cual lo bajaron. Lagunes Santander señaló que a él únicamente le dijeron que se fuera a la chingada o le pasaría lo mismo que a su compañero que le gustaba andar con mujeres casadas, siendo amenazado que si decía algo de lo sucedió lo                        asesinarían. 

DOBLE PROCESO A HOMICIDA 

Ahora, como presunto homicida,  tras de cumplimentársele la orden de aprehensión en su contra, Magdiel Porfirio Lagunes Santander, de 24 años, enfrentará dos procesos penales en el juzgado primero penal. Uno por el delito de portación de arma prohibida, en el que tendría derecho al beneficio de la libertad caucional. Pero el otro es como presunto responsable del delito de homicidio calificado que se le inició en el momento en que agentes federales cumplimentaron la orden de aprehensión que giró el juez primero a solicitud del fiscal segundo investigador, Jesús Treviño Vega, quien encontró elementos suficientes para ejercitar acción penal en su contra. Treviño en su determinación tomó en cuenta el agravante de la premeditación y en base a ello solicitó la orden de aprehensión por el homicidio calificado. Los datos aportados por los familiares, la confesión inicial del presunto y otros datos que aportaron los investigadores a la averiguación dieron origen al esclarecimiento del crimen que en esencia el móvil fue una deuda de 6 mil pesos, que Magdiel tenía pendiente con Ricardo Ramos Jiménez, la víctima. Supuestamente Ricardo pretendía cobrarle 9 mil pesos, es decir 3 mil pesos de recargos, por el tiempo que había tardado en pagárselos y eso fue lo que le molestó a Magdiel, impulsándolo a la consumación del homicidio. Se supone que éste ya llevaba la intención de matar a su acreedor, para liberarse de la deuda.