Xolos tuvo el zaguán prácticamente abierto en gran parte del juego, con un Monarcas sin idea ni ganas de atacar y con muchas complacencias en su sector defensivo.
Sin embargo, el ataque del cuadro fronterizo fue muy intermitente. Por momentos los tiros desviados de Darío Benedetto, luego los acarreos sin acompañamiento de Dayro Moreno y la escasa claridad del venezolano Juan Arango para surtir balones fueron la temática del aparato ofensivo de los caninos.
Y cuando por fin se hizo la luz, la decidió apagar. Al minuto 61, el lateral del Morelia, Carlos Adrián Morales, enganchó del brazo a Moreno para el subsecuente penal, pero el argentino Christian Pellerano voló el balón en el cobro. No hubo una ocasión más idónea en todo el partido para Xolos.
Ni para Monarcas que sólo despertó en los últimos 10 minutos del encuentro, después de que se cayera en una excesiva dependencia de Hamilton Pereira y sus intentos de desborde, y en los disparos de media distancia con Armando Zamorano y Martín Alaniz, quien entró para el complemento por un inoperante Duvier Riascos.
Al 82’, el portero de Tijuana, Cirilo Saucedo, se vistió de luces al rechazar un disparo de Alaniz y luego enderezarse para contener en el contrarremate purépecha. Fue la mejor jugada de la noche con dos equipos en pleito con el gol y la victoria.
Morelia y Tijuana sumaron su cuarto juego sin poder ganar. El caso de los michoacanos cobra ya el nivel de alerta al no tener un solo gol en la campaña y poner así en predicamento a su técnico, Ángel Comizzo. (Morelia, Michoacán / Refoma).