Sólo daños considerables dejó como saldo el aparatoso choque que se registró en el entronque del libramiento Anzaldúas y la carretera Ribereña, entre dos unidades de uso particular.
Peritos viales que acudieron al lugar del accidente constataron que en el choque entre una camioneta Chevrolet Suburban, en la que viajaba una familia mexicotexana y una Chevrolet Equinox conducida por una dama reynosense sólo hubo daños, pues no reportaron desgracias personales.
El accidente se registró a eso de las 14:00 horas cuando Hugo Orlando Alanís, de 38 años, residente en Peñitas, Texas, trató de integrarse al área de rodamiento de la carretera Ribereña de oriente a poniente.
Pero en la maniobra, para cambiar su rumbo no calculó bien e invadió el carril por donde circulaba con normalidad la Equinox, conducida por Ana María Cortinas Palos, de 26 años, residente en la colonia Capitán Carlos Cantú, produciéndose el encontronazo.
Alanís, viajaba acompañado de su esposa Sandra Alanís González, de 38 años y sus dos hijas menores, quienes resultaron ilesas, milagrosamente, al igual que la conductora de la Equinox.
Peritos viales advirtieron que el accidente se había registrado en tramo federal, por lo que habría necesidad de que tomara conocimiento la Policía Federal (división caminos). (Por Antonio Ramírez / antonio.ramirez@latarde.com.mx)