Un adolescente de sólo 12 años murió como consecuencia de una descarga eléctrica que recibió cuando trataba de reubicar un foco en el interior de su vivienda.

El pequeño Héctor N, residente en el vecino municipio de Díaz Ordaz, fue transportado en un vehículo particular por sus padres desde su domicilio hasta el hospital Materno-Infantil, en un intento por salvarle la existencia.

Pero cuando lo ingresaron al área de shock de dicho nosocomio el menor ya iba sin vida. La descarga entró a su cuerpo por sus manos y encontró salida entre los dedos de su pie izquierdo.

La progenitora del menor dijo a las autoridades que su hijo trató de cambiar un foco para otro lugar en el interior de su casa, pero como andaba descalzo y al momento de tomar los dos polos del cableado se produjo la descarga eléctrica que lo lanzó varios metros de espalda.

Al caer se golpeó la región occipital, por lo que hasta ayer las autoridades desconocían si el fallecimiento del menor fue por la descarga eléctrica o por el golpe en el cráneo. Para tal efecto el médico legista en turno habría de practicar la autopsia legal para determinar las causas de la muerte.

Del hecho la UGI-No. 1 tuvo conocimiento al filo de las 23:55 horas tras el aviso de personal de Trabajo Social del Hospital Materno-Infantil, donde se constituyeron elementos de la Policía Investigadora para dar fe e iniciar las pesquisas correspondientes.

Al mediodía de ayer, tras confirmarse que todo se trató de un lamentable accidente casero, el cuerpo del adolescente fue entregado a uno de sus hermanos, quien acudió a identificarlo y reclamarlo. nas de la Ministerial.