Un niño de 5 años que paseaba la mañana de ayer por su vecindario, en la colonia Óscar Flores Tapia, fue presa de un mortal ataque de un perro de raza pitbull.

Aunque la dueña del animal y otros vecinos intentaron detener al perro, éste no soltó al menor Jesús Salvador Espinoza Coronado hasta que ya no tenía signos vitales.

“Lo traía agarrado de la cara, le rasgó la carne, la nariz, las orejas, sus partes se las arrancó, yo iba pasando por la escuela, vi al niño, lo tenía tirado ahí, todo mordido”, comentó un testigo.

“Lo agarré a pedradas al perro, pero el niño ya estaba muerto”, dijo.

Un vecino avisó a la madre del menor, identificada como Verónica Coronado Pérez, quien no creía la noticia, pero al acercarse al sitio terminó desmayada.

Guillermo Maximiliano González Escajeda, padrastro del menor, dijo que el niño era hiperactivo y acostumbraba salir de la casa y visitar a los vecinos.