El cuerpo acartonado que se encontró a orillas del libramiento sur 2, frente a la colonia Campanario, se salvó de ir a la fosa común, pues ayer a través de la información que se difundió en los medios sus familiares tuvieron conocimiento del hallazgo y fueron a reclamarlo, ayer por la mañana.

Juan Sánchez Gallegos, de 48 años, compareció en la Unidad General de Investigación #5 para reclamar el cuerpo de su hermano Martín Sánchez Gallegos, quien desde hacía un mes se encontraba extraviado.

Confirmó que Martín, se encontraba enfermo, padecía diabetes y enfrentaba enfermedades crónicas derivadas de dicho padecimiento. Además tenía un retraso mental y enfrentaba enfermedades de tipo nerviosas que lo mantenían al margen de la realidad.

Por ello, desde hacía un mes había salido del domicilio donde vivía con su padre Tomás Sánchez Martínez y un sobrino de nombre Héctor Montalvo Sánchez, propietario de los documentos que encontraron entre las pertenencias de la víctima.

Autoridades ministeriales, confirmaron a través de la autopsia que la muerte de Martín había sido por causas naturales, derivada de las enfermedades que padecía y la falta de medicamentos que a diario debía haber estado tomando.

Martín ya no regresó a su domicilio situado en calle Topógrafos 210 de la colonia Valle del Bravo, desde hacía casi un mes, precisamente el tiempo que lo habían visto deambular sin rumbo fijo por la orilla del libramiento que conduce al puente internacional Reynosa-Pharr.

Autoridades ministeriales entregaron el cuerpo a los familiares que le darían cristiana sepultura, con lo que el caso se daría por concluido.