Años pasan y pasan y ninguna dependencia se ha preocupado por desazolvar el dren Reynosa, el cual representa un gigantesco foco de infección que genera problemas ambientales a familias de varias colonias de la ciudad.

Arbustos, plantas acuáticas y hasta basura abundan a lo largo del afluente, pero nadie acude al lugar por lo menos a enterarse personalmente de una situación imperante que cada vez es peor.

Ni funcionarios de Ecología local y tampoco de la PROFEPA (Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente) han mostrado interés por buscarle una solución, dicen vecinos de la colonia Del Valle, sobre todo quienes viven a unos cuantos metros del dren.

El hedor que desprenden las aguas y que se acrecenta en época de calor, obligan a la gente a cerrar puertas y ventanas de sus casas porque hay ocasiones en que llega a ser insoportable.

Hace años algunos vecinos consideraron que lo que debiera hacer el gobierno es entubar y no tener el agua a cielo abierto, como forma de evitar que continúe generándose la contaminación ambiental, pero ninguna autoridad ha tomado en cuenta los comentarios sobre el particular y el problema sigue adelante ante la apatía de la o las dependencias a las que corresponde actuar.