Diferencias entre Habilidades duras y habilidades blandas

Estas características de los trabajadores pueden validarles para empleos altamente sofisticados

Durante un proceso de selección de personal, los profesionales encargados de escoger a la persona adecuada para el puesto realizan una evaluación completa de esta persona. Para ello se basan en análisis de su currículum y en la entrevista con el candidato al puesto.

Pero esta evaluación no se reduce solamente a su formación o a su experiencia profesional si no que cada vez son más importantes las habilidades que diferencian a esta persona del resto. Son conocidas como “hard skills” y soft skills” pero ¿en qué consisten y se diferencian estas habilidades?

Las “soft skills” y las “hard skills” en el mundo laboral

A pesar de que tanto las “hard skills” como las “soft skills” se adquieren a lo largo de toda la vida y no solo en los ámbitos educativos o de formación reglada, se ponen en relevancia dentro del mundo laboral, concretamente en los procesos de selección de personal y en el desarrollo de las tareas laborales.

1. “Hard skills” o habilidades duras

Por “hard skills” entendemos todos aquellos conocimientos adquiridos mediante la formación educativa reglada, así como mediante la experiencia profesional. Estas habilidades son susceptibles de ser enseñadas en ámbitos académicos.

Generalmente, la persona aprende las “hard skills” en el aula, mediante la utilización de libro u otros materiales, o en el trabajo mediante la repetición constante de su tarea. Podemos decir que las habilidades duras son todas aquellas habilidades concretas que permite llevar a cabo una determinada tarea o trabajo.

Finalmente, estas habilidades son fáciles de cuantificar, por lo que son las que se tienden a destacar en los currículums y cartas de presentación. Además, son fácilmente reconocibles por las personas que realizan la selección de personal.

Entre las “hard skills” encontramos: 

    Competencias en idiomas extranjeros

    Habilidades de mecanografía

    Programación de ordenadores

    Manejo de maquinaria industrial

2. “Soft skills” o habilidades blandas

Por otra parte, las “soft skills” son mucho más difíciles de cuantificar y hacen referencia a las habilidades interpersonales y sociales que posee la persona que opta al puesto de trabajo. Estas habilidades blandas se manifiestan en las diferentes forman con las que alguien se relaciona e interactúa con los demás.

Estas competencias no se aprenden en el ámbito académico, sino que son adquiridas a lo largo de la vida de la persona, el su día a día. Además, están directamente relacionadas con el concepto de inteligencia emocional y están condicionadas por la personalidad de la persona y por el desarrollo de sus habilidades sociales.

Algunos ejemplos de “soft skills” son:

    Capacidad de comunicación

    Flexibilidad

    Capacidad de liderazgo

    Motivación

    Paciencia

    Capacidad de persuasión

    Habilidades de resolución de problemas

    Trabajo en equipo

    Gestión del tiempo

    Ética laboral

Diferencias clave 

entre ellas

Aunque con la sola descripción de estas ya podemos hacernos una idea de la principales diferencias entre las “soft skills” y las “hard skill”, existen tres diferencias clave entre ellas que las hacen más o menos importante dependiendo en gran medida del puesto para el que se opte y el tipo de carrera laboral que se quiera desarrollar.

1. Cada una de ellas requiere de inteligencias diferentes

Tradicionalmente, ser bueno en habilidades duras se asocia con con el nivel de inteligencia general o coeficiente intelectual (CI), mientras que ser bueno en habilidades blandas requiere de una mayor capacitación o inteligencia emocional.

2. Las “hard skills” son consideradas de igual manera en todas las empresas

Las “hard skills” son habilidades en las que las reglas o consideración tienden a ser igual en la mayoría de las compañías que las requieren. Por el contrario, las habilidades blandas son capacidades o destrezas que se consideran de diferente manera según la cultura de la empresa y las personas con quienes se trabaja.

3. Requieren de diferentes procesos 

de aprendizaje

Como ya comentábamos, las “hard skills” pueden ser aprendidas en escuelas, academias y universidades. Es decir, parten de una formación reglada y existen diferentes niveles de competencia, así como un camino preestablecido para aprender cada una de ellas.

En comparación, no existe un recorrido o procedimiento estandarizado para la adquisición de las habilidades interpersonales propias de las “soft skills”. La mayoría de las habilidades blandas deben ser aprendidas en contextos de interacción personas y casi siempre por ensayo-error.

No obstante, existen una gran cantidad de libros y guías que permiten a las personas conocer y prácticas los aspectos básicos de las habilidades sociales, aunque siempre van a verse condicionados por la personalidad del sujeto.