Vendedores de tacos y comida preparada sobre vía pública, no sólo abarcan espacios durante sus horarios de labores, sino que van más allá, dejando estructura y puestos de forma permanente.
Incluso los propietarios de estos puestos, en su mayoría de tacos, pero también de tortas, antojitos, barbacoa entre otros, han instalado carpas para que en las horas soleadas, sus clientes no sean afectados por los intensos rayos del sol en primavera, verano y por la lluvia.
Uno de estos casos, es el estrecho callejón Chiapas, en donde día y noche los 365 días del año, se colocan carpas que acaparan hasta tres cajones de estacionamiento, en un área en donde siempre hay déficit de espacios para aparcar, por encontrarse cerca, la plaza Benito Juárez, un supermercado y una sucursal bancaria de Banamex.
Al caso se suman diques y planchas de concreto que propietarios de restaurantes echan sobre la superficie de rodamiento y sobre los cajones de estacionamientos, lo que reduce el espacio público para estacionarse.
Ante esta situación, urge que los supervisores de piso municipales, pongan orden en estos espacios, sin necesidad de que se prive a nadie de su derecho a trabajar.